Después de varias horas sin servicios en Facebook, Instagram y WhatsApp ayer 4 de octubre de 2021, la compañía de Mark Zuckerberg ha emitido un comunicado oficial en que lo atribuye un fallo interno. «Queremos dejar claro en este momento que creemos que la causa principal de esta interrupción fue un cambio de configuración defectuoso», asegura la compañía, por lo que descarta que se deba a cualquier tipo de ataque externo o que hayan sido afectados los datos y cuentas de los usuarios.
Así, asegura que «tampoco tenemos evidencia de que los datos del usuario se hayan visto comprometidos como resultado de este tiempo de inactividad». Y añade que sus equipos de ingeniería «han aprendido que los cambios de configuración en los enrutadores troncales que coordinan el tráfico de red entre nuestros centros de datos causaron problemas que interrumpieron esta comunicación».
Asimismo, reconoce que «esta interrupción del tráfico de la red tuvo un efecto en cascada en la forma en que se comunican nuestros centros de datos, lo que paralizó nuestros servicios». «La causa subyacente de esta interrupción también afectó a muchas de las herramientas y sistemas internos que utilizamos en nuestras operaciones diarias, lo que complicó nuestros intentos de diagnosticar y resolver rápidamente el problema, prosigue el comunicado oficial de Facebook.
Restauración de sistemas y vuelta al funcionamiento normal
Desde la compañía, tras la caída de Facebook, Instagram y WhatsApp lamentan «las molestias causadas por la interrupción de hoy en nuestras plataformas. Hemos estado trabajando tan duro como hemos podido para restaurar el acceso, y nuestros sistemas ahora están funcionando nuevamente».
«Nuestros servicios ahora están nuevamente en línea y estamos trabajando activamente para que regresen por completo a sus operaciones normales», prosigue la comunicación oficial de Facebook. Que concluye: «Entendemos el impacto que las interrupciones como estas tienen en la vida de las personas y nuestra responsabilidad de mantener informadas a las personas sobre las interrupciones en nuestros servicios. Pedimos disculpas a todos los afectados y estamos trabajando para comprender más sobre lo que sucedió hoy para poder continuar haciendo que nuestra infraestructura sea más resistente».
Experto de Ironhack Madrid: «Si fuera un ataque, los que lo han perpetrado tendrían ganas de jactarse de los datos robados»
Con motivo de esta noticia, en Marketing Insider Review hemos hablado con Víctor Rodríguez, Program Manager de Ironhack Madrid. Ironhack es una escuela de tecnología que ofrece bootcamps de Programación Web, Diseño UX/UI, Análisis de datos y Ciberseguridad, en formato presencial o remoto. Tiene sede en 9 ciudades del mundo: Madrid, Barcelona, Miami, París, México, Berlín, Amsterdam, Sao Paulo y Lisboa.
A su juicio, «la explicación técnica que Facebook ha comunicado explica de manera plausible lo ocurrido en la tarde de ayer, en este como en casi todos los casos debemos seguir el principio de la navaja de Ockham, el cual establece que ‘en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la correcta’. En mi opinión, y eso solo eso mi opinión, creo que la entrevista de Frances Haugen en la que decía que «Facebook es una traición a la democracia» junto con lo acontecido en la tarde de ayer hacen que nos hayamos vuelto mas suspicaces».
Por este motivo, preguntado acerca de si debe preocupar a los usuarios de las RRSS de Facebook que su privacidad de datos y seguridad de las cuentas haya estado en peligro, considera que «si se tratara de un ataque, estoy seguro de que aquellos que lo han perpetrado tendrían bastantes ganas de jactarse de los datos robados». Ya que, añade, «estaríamos ante una filtración ya publicada en los foros habituales en la deep web».
Finalmente, Rodríguez, al ser preguntado acerca de por qué esta caída de Facebook, WhatsApp e Instagram ha durado 6 horas y a nivel global, opina que «nos hemos acostumbrado a que los problemas técnicos duren un periodo muy breve de tiempo, pero cuando la parte afectada está a tan bajo nivel, cuando es la propia configuración de la infraestructura la que falla, no es tan sencillo como un deshacer y guardar».
«Si a eso le sumamos los protocolos de acceso a los recintos (que son reales) y que las personas adecuadas para resolver el problema no viven en el piso de arriba sucede la tormenta perfecta», concluye.