Durante las últimas décadas el marketing ha sido el protagonista y narrador de las historias de las marcas a través de diversas estrategias, con el objetivo de poder contar quiénes son, cuáles son sus valores y a quienes les están hablando. Sin embargo, hoy en día, ante la diversidad de canales de comunicación y las múltiples comunidades, el triunfo de las love brand está íntimamente relacionado con su saber hacer.
Por lo cual, para que una marca llegue a ser amada por sus consumidores, más allá de relatar quienes son, deben poder llevarlo a cabo. Es en este punto en cual la pregunta es ¿storytelling o storydoing?.
Hasta hace unos años podíamos observar cómo estas dos estrategias son utilizadas por separado, por un lado el storytelling -en la cual las marcas relatan una historia similar a la realidad de su audiencia-, y el storydoing -donde la audiencia es protagonista de estas historias-. Sin embargo, poder unir el saber hacer, que la audiencia sea el centro y crear historias junto a ellos, ha sido la estrategia de marketing ganadora entre las love brands.
De acuerdo al informe del año 2022 de Hootsuite y Talkwalker, las marcas “más queridas” son aquellas que consiguen acercar el lado personal e individual con problemáticas globales como la crisis climática, la pandemia o conflictos internacionales. Entonces la pregunta es ¿cómo lograr involucrar a las audiencias con las marcas través del «storydoing»?
Si bien, no existe una solución única para este desafío, dado que cada marca y cada persona es única en sí misma. Sin embargo, es posible crear un mapa mental o establecer algunos puntos clave para desarrollar una estrategia efectiva.
El primer paso que debemos tener en cuenta es conocer a nuestra audiencia: dónde están, qué les preocupa, qué buscan dentro y fuera del entorno de la marca. Es importante entender sus rutinas, los lugares digitales y físicos donde se encuentran. Al hacer este análisis, es posible encontrar oportunidades únicas para transmitir el mensaje. De esta manera, sabremos cómo, cuándo y dónde comunicarnos con nuestra audiencia.
Para involucrar a nuestra audiencia, una manera efectiva es utilizar las redes sociales y los influencers. El éxito del Influencer Marketing se debe a la capacidad de los creadores e influencers para conectarse con su comunidad, interactuando con ellos y haciéndolos partícipes de su historia. Esto se logra trabajando su historia y su storytelling de manera natural, basándose en su entorno, sus preocupaciones y momentos de vida, lo que genera una conexión auténtica y fidelización a través de ella.
Según nuestro estudio State of the Influencer Marketing, los consumidores ya no perciben la comunicación de las marcas como algo auténtico, por lo que es necesario apoyarse en distintos canales, medios y formatos para llegar a ellos de forma efectiva. Las marcas ya no pueden hacer publicidad de cara al cliente, sino que deben crear historias con ellos.
Los “storydoers” pueden ser los influencers
Los influencers son quienes generan historias o “storydoers” en sí mismos. Para crear un storydoing exitoso, como marca, debemos crear una plataforma comunicativa donde tanto la marca como los influencers involucren a la audiencia en la historia que queremos contar. Para lograr esto, debemos tener en cuenta los intereses de la audiencia y crear activaciones que la hagan participar a través de las redes sociales.
Actualmente, el storydoing es una herramienta clave para llegar a nuestra audiencia y crear conciencia de marca. No solo genera impacto, sino que también ayuda a definir el propósito de la marca, crear valor para los consumidores, aumentar la lealtad de los mismos y, en última instancia, maximizar las ganancias. En definitiva, un enfoque «win-win».
Tribuna de opinión de Caritina Knight, VP Operations Americas de Samy Alliance