Estamos en un mundo en el que día a día se consume de manera inconsciente y no crítica, esto se evidencia cuando las personas adquieren productos o servicios, que demandan usos de energía y recursos naturales, sin tener en cuenta de dónde vienen y dónde terminarán, esto a causa de la ausencia de criterios sociales y medioambientales, y el mundo de la moda tiene parte de culpa en ello.
Además de que no se tiene en cuenta que el consumo responsable consiste en mitigar el consumo de productos o servicios que generan un impacto negativo en el ambiente y el diario vivir.Greenpeace (2021).
El consumo responsable de bienes y servicios es un tema que nos involucra y afecta como sociedad. Actualmente, la industria de la moda es una de las más poderosas industrias en el mundo “En la actualidad los productos textiles según la Organización Mundial del Comercio (OMC) representan un 5% del comercio mundial de productos de manufactura»(Rodriguez, J. 2018), y “es la segunda industria con un mayor impacto ecológico” (Vergara, J. 2020). Esto se debe a las tendencias e innovaciones a las cuales deben recurrir los diseñadores para posicionarse y mantenerse en el mercado y así lograr la satisfacción de consumidores cada vez más exigentes.
Dentro del consumo de la moda y más en el proceso de la compra se incorpora varios elementos, ya al comprar se satisfacen necesidades y deseos y está también activa toda una serie de procesos, los cuales generan una emoción que puede ser sensorial o sentimental, todo ello provocando que las personas se acerquen de manera continua al mismo lugar para adquirir productos, puesto que les brinda una conexión emocional.
“La gente elige aquellas marcas que tengan una personalidad deseable o atractiva, que aumentan la autoestima, que dan confianza, seguridad o divierten; es decir, se compra por los atributos psicológicos y sociales que distinguen y otorgan significado a las marcas.” (Rodríguez, C. 2016), por ende en sus manos tienen el control de lo que el consumidor adquiere y por esto juegan un papel importante dentro del consumo responsable.
El crecimiento en el mundo de la moda
Una de las principales razones por las que el sector textil ha tenido un crecimiento considerable se debe a la tendencia reconocida como “fast fashion” (moda rápida), consiste en introducir en el mercado nuevos diseños en el menor tiempo posible, llevando a “condiciones laborales precarias, generalmente en el sur de Asia, como pueden ser: Bangladesh, India, Camboya, Indonesia, Malasia, Sri Lanka y China”. (Greenpeace, 2021). Donde los trabajadores son sometidos a arduas horas de trabajo, con salarios bajos y pocas garantías laborales.
Siendo así el consumo descontrolado el causante de estos abusos. Esto también se debe a que los empresarios buscan países en vía de desarrollo para la ejecución de su actividad, vulnerando así los derechos fundamentales, como lo son; el derecho a la educación, a la salud y el bienestar, que impide asegurar un futuro digno, teniendo en cuenta que este trabajo no tiene la retribución correspondiente. Todo esto y mucho más maquillado con publicidad que persuade al consumidor quienes desconocen el trasfondo de la situación. Rodriguez y Huertas (2018).
A raíz de estos problemas socioeconómicos, la ONU (Organización de las Naciones Unidas) en el 2015 implementó la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, que consiste en minimizar los riesgos y afectaciones a los cuales están expuestas las personas y el medio ambiente, que tiene como finalidad erradicar en su totalidad la pobreza y desigualdad social, facilitando el acceso a educación y a vivir en condiciones dignas, buscando progreso y bienestar a nivel mundial. ONU (2015).
Asimismo, la organización estableció 17 objetivos que buscan una regulación y control para la buena ejecución de la agenda en los que incluyen la igualdad de la mujer, el cambio climático, la educación, combatir contra la pobreza, entre otros… Por lo cual los 193 países miembros deben cumplirla. “Al adoptarla, los Estados se comprometieron a movilizar los medios necesarios para su implementación mediante alianzas centradas especialmente en las necesidades de los más pobres y vulnerables.” (Asamblea General de la ONU, 2015).
Teniendo en cuenta que estas acciones generan un cambio significativo en el planeta, por esta razón es importante que las marcas de moda no solo se interesen por aplicar y cumplir el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 12 de Producción y Consumo Responsables, sino que también vean de vital importancia y necesario adoptar los ODS 3 (Salud y bienestar), el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico) que les ayudará a generar cambios económicos, sociales y ambientales, convirtiéndose así en una industria con propósito.
Redactado por los alumnos:
- Laura Gómez
- Javier Moreno
- Natalia Monroy
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