Siete de cada diez directivos encuestados afirman que no tienen previsto reducir sus plantillas en 2021, es más para 2022 ampliarán invertir en tecnología para sus empresas. Entre aquellos que sí van a hacer recortes de personal (un 15,8%), más de la mitad van a realizar solo despidos puntuales o despidos que afectarán a entre un 1% y 5% de la plantilla. El 87,6% tampoco planea realizar despidos en los próximos dos años.
Así consta en los resultados del II Barómetro Badenoch + Clarki sobre Liderazgo Directivo en España, que señala que la inversión en tecnología (59,5%) y la formación de empleados (49,1%) serán las áreas a las que destinarán más recursos. En el caso de la formación, esta inversión tendrá un doble objetivo: optimizar el desempeño de las plantillas (upskilling) y reciclarlos en nuevos puestos cuando sea necesario (reskilling). En tercer lugar, se sitúan las medidas de conciliación y flexibilidad para las plantillas (33,7%).
Un 29,9% también planea destinar recursos para mejorar los salarios de sus empleados, un 19,9% quiere mejorar sus herramientas de reclutamiento, selección y contratación, y un 9,6% invertirá en políticas de diversidad. Otros aspectos en los que van a realizar inversiones son en mejoras internas, diversificación del negocio, equipos y herramientas y en reducir su endeudamiento (4,8%).
Inversión por tamaño y tipo de empresa
Si analizamos la intención de inversión de los directivos según el tamaño de sus empresas, se puede ver cómo más allá de los intereses que comparten todos en común, un mayor porcentaje de ejecutivos de pequeñas empresas y microempresas tienen interés en invertir en tecnología. Mientras que la partida de reclutamiento, selección y contratación, así como la de políticas de diversidad es más importante para aquellos y aquellas que dirigen grandes y medianas compañías.
En cuanto a las diferencias por tipo de empresa, los representantes de empresas públicas muestran poco interés en invertir en la formación de empleados y en medidas de conciliación. Los directivos de empresas mixtas no dedicarán muchos recursos a reclutamiento y selección en comparación con el resto de organizaciones. Y los líderes de compañías privadas planean realizar menos inversiones en temas de diversidad.
La transformación digital de la empresa e invertir en tecnología en 2022
Preguntados por cuáles creen que serán los cambios más significativos que traerá la digitalización de sus empresas en los próximos años, un 54% de los directivos y directivas encuestados por Badenoch + Clark cree que lo más relevante será el mayor nivel de habilidades tecnológicas que tendrán los equipos en general. Un 51,2% de los encuestados piensa que también se podrá ver una enorme progresión en cuanto a softwares, programas, plataformas y herramientas, con lo que invertir en tecnología en 2022 se antoja muy necesario.
Para el 44,7%, la integración de herramientas de Inteligencia Digital y Big Data en sus procesos será lo que más impacto tendrá en sus organizaciones. Un 28% considera que las tecnologías relacionadas con el Internet de las Cosas (IoT), que hace referencia a la conexión y comunicación de todo tipo de dispositivos a través de la Red, generará también mucho interés. Así como los sistemas y estrategias de seguridad informática o ciberseguridad para evitar ataques y robo de datos, algo que consideran muy importante el 23,4% de los líderes consultados. Otros avances quedan relegados a un menor impacto (uso de la realidad virtual, Blockchain, Cloud…).
En este punto sobre si se va a invertir en tecnología en 2022 en las empresas, la nota de prensa cree que es interesante conocer cómo piensan los directivos y directivas de las diferentes generaciones que conviven en la empresa española pues la percepción de cuáles serán los cambios tecnológicos que más influirán en las organizaciones en los próximos años varía un poco según la generación a la que pertenecen los líderes.
Así, un mayor porcentaje de la Generación Y (Millennials) confían en que habrá un mayor nivel en las habilidades y un mayor número de herramientas tecnológicas, pero no creen que vayan a ver grandes avances en Ciberseguridad o en IoT. Mientras que los más jóvenes, que pertenecen a la Generación Z, concentran los avances solo en cuatro áreas concretas: software y herramientas, IA y Big Data, Ciberseguridad y Blockchain.
Recursos para afrontar la transformación digital
La percepción también cambia según el puesto que ocupa la persona encuestada. Aquellos más próximos a Dirección y Gerencia, con objetivos más estratégicos, dan mayor importancia a las posibilidades de negocio que ofrecerán la IA y el Big Data. Mientras que los directores/as de área, que suelen cubrir puestos organizativos, muestran especial interés por las habilidades tecnológicas y las herramientas que puedan facilitar el trabajo en equipo en el futuro. Y los managers, más cercanos al día a día de la plantilla, centran su interés en las habilidades y herramientas que puedan facilitar el trabajo y también la seguridad en los procesos en los próximos años.
Sobre el punto en el que se encuentran las empresas españolas a la hora de abordar la digitalización, un 58,4% de los directivos españoles que han participado en este estudio consideran que sus empresas cuentan con los recursos necesarios para afrontar la transformación digital que necesitan, frente a un 41,6% que piensa que no disponen de los recursos suficientes.
Los directivos y directivas de grandes empresas son los que se sienten más preparados para afrontar esta digitalización (71,4%), porque muchas de estas compañías ya habían iniciado sus procesos antes de la pandemia. En el otro extremo se sitúan los directivos de microempresas, pues solo un 47,4% cree contar con los recursos suficientes.
Entre las pymes, es curioso comprobar que hay un mayor porcentaje de líderes de pequeñas empresas con recursos frente a los de dirigen compañías de tamaño mediano. Por último, consultados por los aspectos más importantes para abordar la transformación digital en sus empresas, la formación de los empleados es el aspecto señalado como más importante por el 46,7% de los directivos y directivas. El segundo aspecto considerado más importante es el apoyo de instituciones públicas (26,2%), seguido de mayor apoyo interno (16,5%) y contratación de nuevos perfiles cualificados (10,7%).