Cuando el Grand Theft Auto nos permitió secuestrar un coche y recorrer las calles de la ciudad por primera vez, nadie esperaba un realismo al nivel de Forza. Pero con el paso de los años, una cosa ha quedado clara: la física de los vehículos de Grand Theft Auto ha pasado de ser un caos a casi la perfección. Si llegaste a jugar en la época en que el juego se veía desde arriba, sabes exactamente a qué nos referimos: el recorrido fue salvaje, tanto en sentido figurado como literal.
Hoy en día, la física de los vehículos del GTA forma parte del ADN del juego tanto como sus vallas publicitarias satíricas y sus atracos escandalosos. Pero, ¿cómo consiguió Rockstar transformar esos carritos de la compra resbaladizos en supervehículos que van suaves como la seda?
Un camino lleno de baches: La mecánica de los primeros GTA
Vamos a rebobinar hasta los GTA originales de finales de los 90. Estos primeros títulos eran divertidos, frenéticos y llenos de un caos explosivo, pero ¿tenían una conducción suave? No exactamente. Parecían ladrillos de mantequilla en una pista de hielo, sobre todo en las curvas. Y la cámara vertical tampoco ayudaba. Necesitabas un sexto sentido para predecir hacia dónde se desviaría tu sedán robado.
Cuando GTA III apareció en 2001 y se pasó al 3D, las cosas mejoraron, pero apenas. La conducción seguía sintiéndose más arcade que simulación. Podías chocar contra un poste de la luz a 160 km/h, rebotar en él como una bola de pinball y seguir conduciendo. ¿Realista? La verdad es que no. ¿Entretenido? Por supuesto.
Alcanzando el punto óptimo en San Andreas y más allá
Cuando llegó GTA: San Andreas, Rockstar empezó a ajustar las cosas. Los vehículos empezaron a sentirse diferentes: las bicicletas no se comportaban como los muscle cars, y los camiones no giraban en cuestión de segundos. De pronto, el peso y la tracción importaban. No mucho, pero sí lo suficiente como para que los jugadores se dieran cuenta.
Avanzamos hasta GTA IV, cuando la franquicia dio un giro brusco hacia el realismo. A algunos fans les encantó. Otros no estaban tan seguros. Los vehículos pesaban. Daban coletazos si girabas demasiado rápido. Golpear un bache a alta velocidad podía arruinar tu huida. La física era revolucionaria, pero también divisiva.
Esa evolución continuó con GTA V, donde Rockstar consiguió encontrar un equilibrio casi perfecto. Los vehículos sentían el suelo, pero eran divertidos. Los todoterrenos subían las colinas como tanques, los vehículos deportivos se adherían a la carretera como pegamento, y las motos… bueno, seguían tratando de matarte en cada curva. Estas mejoras sutiles realzaban cada misión, cada carrera y cada persecución policial caótica.
Y para los jugadores que buscan circular con estilo sin vaciar su cartera, usar una tarjeta prepago Paypal es una forma rápida y segura de recargar y conseguir esos vehículos o mejoras de alta gama sin perder el ritmo.
Personalización y realismo online: La experiencia de conducción actual del GTA
La cultura de los vehículos explotó en GTA Online. Con cientos de opciones disponibles y docenas de talleres de tuning, manejar se convirtió en algo más que llevar un medio de transporte: se convirtió en un todo estilo de vida. Rockstar incluso empezó a atender al ámbito de las carreras clandestinas con actualizaciones que perfeccionaban el comportamiento de los vehículos en distintas condiciones.
¿Quieres derrapar bajo la lluvia? Puedes hacerlo. ¿Quieres un deportivo que tome las curvas como si fuera sobre raíles? Construye uno. El sistema de conducción ahora te permite sentir la diferencia entre un lowrider hecho para pasear y un vehículo de rally construido para comer tierra. Ese nivel de detalle solía estar reservado a los simuladores de carreras, pero ahora GTA te lo ofrece con estilo.
La carretera que nos espera
Con el GTA 6 en el horizonte, los fans ya están especulando sobre el próximo salto en el realismo de los vehículos. ¿Presión dinámica de los neumáticos? ¿Suspensión adaptativa? ¿Quizá incluso más inmersión en la conducción en primera persona? Si la historia sirve de guía, Rockstar volverá a subir el listón.
Una cosa es segura: sea cual sea la evolución de los vehículos, los jugadores estarán allí para tomar cada curva a toda velocidad.
Y gracias a mercados digitales como Eneba, subir al asiento del conductor con las mejoras que quieras nunca había sido tan fácil.

