En vísperas de la COP27, la GSMA ha publicado una nueva visión a largo plazo sobre cómo la industria del móvil puede aumentar la economía circular de sus cadenas de suministro y producción de dispositivos móviles, tal y como informa la entidad en una nota de prensa enviada a los medios el día 2 de noviembre de 2022.
Esta ambición está respaldada por un «modelo de circularidad» recientemente desarrollado para la industria de la telefonía móvil, que establece los principios que los operadores deben tener en cuenta para construir una cadena de suministro y fabricación circular para 2050, basada en dos conceptos generales de «longevidad maximizada» y «cero residuos».
«El sector de la telefonía móvil está haciendo verdaderos progresos en materia de circularidad, pero aún queda mucho por hacer para reducir el impacto medioambiental de los dispositivos de los que dependemos cada día para estar conectados. Al establecer una nueva visión de cambio sistémico para el sector, estamos sentando las bases para que la industria del móvil reduzca los residuos materiales y aumente la longevidad de los dispositivos».
Steven Moore, Director de Acción por el Clima de la GSMA y Responsable del sector de la telefonía móvil para los Campeones del Clima de la ONU
«Una mayor circularidad de los dispositivos tiene un enorme potencial para reducir el impacto medioambiental negativo y, al mismo tiempo, permitir nuevos modelos de negocio que puedan generar nuevas oportunidades comerciales. Se trata de un gran paso adelante para nosotros como industria, pero aún queda mucho trabajo por hacer. Tele2 se enorgullece de haber liderado el desarrollo del documento de estrategia, ya que estamos comprometidos con el avance de la economía circular mediante el desarrollo de nuevas ofertas a los clientes basadas en un modelo de negocio circular, que será clave para que reduzcamos nuestro impacto climático negativo y alcancemos nuestro objetivo de alcance 3/cadena de valor basado en la ciencia».
Erik Wottrich, Director de Sostenibilidad de Tele2
Repercusiones medioambientales
Los teléfonos móviles «desempeñan un papel esencial y positivo en la vida de las personas de todo el mundo, ya que nos conectan con nuestros seres queridos, posibilitan la inclusión digital y aportan progreso económico en todo el mundo». Sin embargo, como señala la asociación, «a lo largo de su ciclo de vida, también tienen repercusiones medioambientales, tanto positivas como negativas». Los teléfonos móviles, por lo tanto, «contribuyen a la reducción de las emisiones de carbono al reducir la necesidad de viajar, pero también tienen su propio impacto medioambiental».
A este respecto, la nota de prensa explica que del ciclo de vida de un teléfono móvil, «la mayor parte del impacto ambiental -alrededor del 80%- se produce en su fabricación». En la actualidad, un smartphone medio contiene más de 50 materiales diferentes, como plásticos, cerámicas, metales raros, cobre y silicio. La extracción de estos materiales «puede tener un impacto medioambiental y social negativo» y «la fabricación y el montaje también contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero por el uso de combustibles fósiles».
Según el comunicado, en la actualidad, se venden alrededor de 2.000 millones de teléfonos al año, y más del 90% de la población mundial posee un teléfono móvil. Sin embargo, el 85% de los teléfonos móviles «no se reciclan formalmente en la actualidad, lo que limita el ciclo de vida de los materiales utilizados para construirlos y reduce las oportunidades de mejorar la inclusión digital ampliando el acceso a dispositivos reutilizados asequibles».
Por este motivo, la GSMA considera que «prolongar un año la vida útil de todos los teléfonos inteligentes del mundo tiene el potencial de ahorrar hasta 21,4 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año para 2030, lo que equivale a retirar más de 4,7 millones de coches de la carretera».
El documento de la GSMA subraya de este modo «la importancia de implicar a todos los elementos de la cadena de suministro para impulsar un cambio radical en la circularidad del mercado de los dispositivos móviles: desde los operadores hasta los proveedores, desde los fabricantes hasta los consumidores, desde los reparadores hasta los recicladores; todos tienen un papel que desempeñar».
Nuevo modelo de circularidad que propone la GSMA
Teniendo en cuenta todo lo anterior, E¡el nuevo «modelo de circularidad» de la GSMA gira en torno a los principios de «máxima longevidad» y «cero residuos» porque «la longevidad es importante para reducir el impacto de la producción de dispositivos». Un aspecto en el que la nota de prensa concreta que el tiempo medio de uso de un teléfono es de unos tres años, «pero la vida útil técnica es de entre cuatro y siete años y la vida útil óptima de un teléfono móvil para minimizar su impacto climático podría ser de al menos 25 años».
Aunque la visión de la GSMA establece un camino futuro hacia la «verdadera circularidad», los operadores de telefonía móvil ya están haciendo progresos. Las investigaciones muestran que el 11% de los teléfonos inteligentes que se venden hoy en día en todo el mundo son reacondicionados, y el mercado va en aumento.
Según el comunicado de prensa, «los consumidores también se interesan cada vez más por los productos de segunda mano, así como por la sostenibilidad en general, lo que significa que los dispositivos se utilizan durante más tiempo y que los planes de reciclaje de dispositivos se utilizan con más frecuencia». En este sentido, recomendamos la lectura de la noticia sobre el informe Cierra el Círculo de Milanuncios.
Para concluir, la GSMA detalla que en los últimos siete años, el ciclo de sustitución de teléfonos móviles ha aumentado en 10 meses, pasando de 24 meses en 2014 a 34 meses en 2021 en todo el mundo. Y de cara al futuro, «se espera que esta tendencia continúe, ya que se prevé que el mercado de dispositivos móviles reacondicionados supere los 140.000 millones de dólares en 2030, frente a los 49.900 millones de dólares de 2020».